Criselefantino: del griego χρυσός chrysos, ‘oro’, y ελεφάντινος elephantinos, ‘marfil’.
Las criselefantinas son unas figuras de bronce y marfil que empezaron a realizarse a finales del siglo XIX pero no fue hasta después de la primera guerra mundial cuando, dentro del llamado Art Nouveau, se desarrollaron plenamente.
En 1925 se celebra en París la Gran Exposición Internacional del Arts Décoratifs et Industriels Modernes de donde toma su nombre el nuevo estilo Art Decó, los artistas representan la figura de la mujer sacada del music hall y de los ballets rusos y lo hacen dotándola de espiritualidad, idealizando la belleza y siempre en movimiento.
El origen de esta denominación de criselefantinas se encuentra en un referente histórico, la antigua Grecia. En la época de Fidias se utilizaba la técnica de combinar el oro (chrysós) y el marfil para la creación de estatuas que representaban a las diosas mitológicas. El marfil se aplicaba a las partes carnosas que quedaban al descubierto configurando así un aspecto realista de las figuras, para el ropaje su utilizaba el oro, relativamente abundante ya que procedía de las minas de las colonias.
Curiosamente, a finales del siglo XIX otro imperio colonial, en esta ocasión Bélgica, aprovecha sus recursos del Congo y anima a los artistas a utilizar el marfil en la elaboración de sus creaciones. En 1894 Van Estuelde, secretario de Estado, dicta una normativa para que los artistas dispongan de las mejores piezas y de forma gratuita, con el fin de estimular su consumo en producciones más estandarizadas.
Posiblemente una de las mejores colecciones de criselefantinas se encuentra en el Museo de la Casa Lis de Salamanca gracias a la fundación "Manuel Ramos Andrade" con piezas de los mejores autores de este movimiento como H. Chiparus, F. Preiss, R. Colinet, J. Clará, L. Alliot y muchos otros.
Marian
5 comentarios:
Preciosísima entrada, es sublime la belleza plástica de estas figuras, admiro a aquellos artistas.
Lástima que encierren tras su arte una matanza tremenda de animales inocentes. Pero así es el ser humano.
Os sigo fielmente desde hace unos días, descubriendo con tanta comodidad artistas maravillosos. Miles de gracias.
Un saludo.
Ciertamente que son de gran belleza, Isabel, me recuerdan a las porcelanas de Lladró.
Muchas gracias por tu comentario. Un honor que nos sigas, y deseamos que te sigan interesando entradas futuras.
Saludos cordiales.
Os sigo desde hace poco y me tenéis encantado. Valoro vuestro enfuerzo de documentación y vuestro buen ojo.
Un placer
Te agradecemos el comentario, JAMS, y el placer es nuestro por tenerte entre los seguidores. Por cierto, felicidades por tus dibujos.
Saludos cordiales.
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