Conocidos como crop circles, círculos de las cosechas, círculos de los cultivos, agroglifos y por muchos nombres más, este fenómeno de los extraños diseños que aparecen en los cultivos en distintas partes del mundo desde hace décadas ha representado y representa un misterio apasionante para los que se han dedicado a su investigación.
Se trata de complejas formaciones geométricas que aparecen, durante todo el año y sobre todo tipo de vegetación (grano, maíz, espinaca, patatas, zanahorias, plantas de mostaza, etc.), pero también sobre nieve, hielo y arena e incluso en bosques, donde árboles enteros aparecieron doblados hasta el suelo en círculo.
Los CC’s no son un fenómeno moderno. Grabados y dibujos de hace cientos de años así lo demuestran. En el Reino Unido, los granjeros recuerdan haber visto círculos y dibujos parecidos desde hace generaciones.
En la edad Media cuando aparecían en épocas de cosecha, se les llamaba “Círculos de las Hadas”, por cuanto aparecían inexplicablemente de un momento a otro, acompañados de un extraño zumbido en el ambiente. Se advertía a la gente del peligro que suponía para alguien adentrarse en esos círculos mágicos, ya que podrían desaparecer y quedar prisioneros en el mundo de los Gnomos, Hadas y Elfos.
En 1.966, en la provincia de Queensland en Australia, aparecieron unos óvalos perfectos y sencillos cuya creación no podía atribuirse a la acción humana. Se los calificó de "nidos de platíllos" y pasaron a formar parte de los enigmas pendientes de la ufología.
Pero fue alrededor de 1980 cuando se empezó a prestar atención de verdad al fenómeno, principalmente en el sur de Inglaterra, donde aparecen la mayoría de los diseños. A principios de esta década, los medios británicos informaron sobre esta cuestión por primera vez.
Desde entonces, miles de agroglifos se han descubierto en muchos países del mundo. Cientos aparecen cada año, la mayoría durante las noches de verano al sur de Inglaterra, donde se produce la mayor concentración de este fenómeno alrededor de los lugares sagrados de Stonehenge, Avebury y Silbury Hill.
La compleja geometría inherente a muchas de las formaciones. La precisión que se logra en campos que son ondulados o inclinados, que abarcan grandes extensiones de terreno, en la oscuridad de la noche y en todo tipo de climas, estimula la curiosidad.
Sin entrar en cuál pueda ser su origen, no cabe duda que, como mínimo, son decorativos y artísticos, como una exposición de cuadros gigantes.
Marian
4 comentarios:
Hola:
Desde luego no dejan de ser tan perfectos como enigmáticos.
Hay quien los atribuyen a los extraterrestres.
Gracias por publicar esta entrada tan intere4sante.
Besos, Montserrat
La verdad es que bonitos son y como estan rodeados de ese misterio, son una pasada. Pero a los dueños de esas cosechas, mucha gracia no debe hacerles.
Me parece muy interesante vuestro blog y me he leido unas cuantas entradas. Os sigo, vale?
Gracias por el comentario, amiga Montserrat, y aunque hay diferentes teorías sobre su origen, nadie sabe a ciencia cierta cuál es.
Un abrazo.
Gracias por seguirnos, Ángel, y es posible que a los dueños no les guste mucho, pero también puede ocurrir que gracias a eso, tengan visitantes que van soltando billetes, y eso nunca viene mal.
Saludos cordiales.
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