miércoles, 29 de agosto de 2007

LA PINTURA CUBANA







La pintura es la más genuina de las expresiones plásticas del país. La vanguardista, de los años 20 (siglo XX), inauguró un nuevo momento en la pintura cubana. El movimiento moderno tuvo su primera y más importante exposición en 1927, auspiciada por la Revista de Avance. Los años que siguieron fueron de consolidación del movimiento moderno, lo que se manifestó en la celebración del Primer Salón de Arte Moderno en 1937. Artistas jóvenes iniciaban ya un nuevo momento en al arte cubano, que se concretaría con la llamada Escuela de La Habana en la década del 40. En 1942 regresa a Cuba Wifredo Lam, después de una larga estancia en Europa y una experiencia de taller con Pablo Picasso. Con el triunfo de la revolución, el movimiento plástico se fortalece a partir de la creación en 1962 de la Escuela Nacional de Artes Plásticas. Figuras muy importantes como Raúl Martínez y Antonia Eiriz, integraron el claustro de profesores. Unos años más tarde, en 1976, se funda la Facultad de Artes Plásticas del Instituto Superior de Arte.
La pintura cubana durante los últimos 30 años ha mostrado gran capacidad para asumir las influencias más importantes del arte internacional con sentido propio y creativo, asumiendo al mismo tiempo, una postura crítica en sus temas, para continuar definiendo así los rasgos de la identidad cubana.
Como muestra, cuatro pintores: Wifredo Lam, Eduardo Guevara, Alejandro R. Montesinos y Manuel H. Valdés. Y parte de su obra.

Virtu.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante toda la página. Me ha encantado especialmente el artículo de las alcantarillas japonesas, que curioso. Debe ser interesante ir andando, mirar el suelo y ver algo tan bonito.

Lo del chocolate también me llama. Soy una adicta.

Me iré pasando.

Anónimo dijo...

Gracias por tu comentario, Lily. Y sí, es cierto, pasear por una calle, observando obras de arte disfrazadas de alcantarillas, debe ser precioso. Más aún cuando se ven por primera vez.
Saludos.